“Cuando comenzamos a profundizar en nuestra mente subconsciente, a través de la voz de nuestro Corazón Trino, iniciamos el proceso de Transformación a linear nuestra voluntad emocional con la de nuestro Yo Superior (llamado también Yo Álmico o Sobre Alma) y de esta manera con la Voluntad Divina del Creador; permitiendo a su vez, que esta se convierta en el guía y director de nuestras experiencias vitales; elevando y refinando la consciencia de nuestro cuerpo emocional, lo cual es gratificante e iluminador.
Cuando deseamos y manifestamos subir por la Escalera de Jacob, es decir, la escalera de la Ascensión, aprendemos a ver los eventos de nuestra vida desde un punto de vista más elevado y comenzamos a escuchar la voz de nuestra consciencia, que es nuestro Yo Consciente; entonces a partir de allí, nuestros cuerpos: emocional y mental comienzan a resonar con frecuencias vibratorias mucho más altas, más armoniosas.
Ahora estamos listos para enfocar nuestra atención en el refinamiento, elevación y armonización de nuestro cuerpo mental; el cual conjuntamente con nuestro Yo Superior comienzan a revisar nuestras creencias, nuestros hábitos y la calidad de nuestra consciencia mental, revaluando los principales juicios y actitudes que nos han sido transmitidos por nuestros mayores; así como por los líderes culturales, religiosos y gubernamentales, mientras gradualmente salimos de los patrones de la consciencia colectiva, de los planos astrales inferiores y los superamos.
Una vez que hayamos pasado por el doloroso proceso de ruptura o sanación de los pactos o acuerdos con aquellos con quienes hemos experimentado interacción kármica, podemos cortar conscientemente cualquier cordón energético remanente entre nuestras almas. En este proceso, comenzamos a obtener una comprensión de las Leyes Universales de la Manifestación, empezando a usarlas activamente, mientras vamos lentamente refinando nuestras habilidades como co-creadores en el Plano Terrenal de la existencia.
Amorosamente perdonamos y pedimos perdón, para que cada uno de nosotros pueda convertirse otra vez en un Ser Soberano.
Al sanar y transmutar nuestras vidas pasadas, entramos en el futuro sin la pesada carga del Karma, con nueva consciencia, fe y confianza en el funcionamiento del Universo, cediendo el control a nuestro Yo Superior; porque ahora entendemos que es nuestro Divino Derecho de Nacimiento disfrutar del Amor, la belleza y la abundancia de nuestro Padre-Madre Dios. También entendemos que nuestro Yo Superior ve las cosas desde un punto de vista más elevado y siempre nos dirigirá hacia el mejor resultado de nuestras acciones.
Una vez que sanemos el pasado y empecemos a escribir nuestro futuro, sin karmas; entonces, nos podemos enfocar en el eterno momento del ahora, el único y verdadero momento que hay, por eso lo llamamos presente, ya que es un regalo de vida.
Al fusionarnos con nuestro Yo Superior, nos fusionamos a la vez con nuestra sabiduría espiritual, obteniendo acceso a nuestra Mente Sagrada y al cofre del tesoro de la Consciencia Mental Superior. Esta fusión acelerará el proceso de transformación de nuestro despertar, en el cual, el cuerpo físico es afectado de varias maneras, ya que los síntomas de la ascensión normalmente son incómodos y dolorosos, lo importante es que al reconocerlos se torna gratificante, por el objetivo que se está consiguiendo: la ascensión individual y planetaria”.
Tomado del libro: Vivencias de un Sanador Cósmico, Mensajes de Los Maestros.
Zolemgeh Estrella